martes, 16 de febrero de 2010

Como para no pensar igual

Nos trasladamos ahora a la antigua colonia española de Cuba. Qué curiosidades tiene la vida, de allí nos sacaron los estadounidenses y ahora no los pueden ver ni en pintura. No hay más que darse una vuelta por La Habana o Santiago para comprobar que el bloqueo y los vecinos del Norte son monotema en los carteles que llenan las deterioradas fachadas de lo que otrora fue refugio de gansters. Sí, mucha gente no lo sabe, pero en La Habana se disfrutaban de noches de juego y diversión al más puro estilo de Las Vegas en la época de Batista.


Pero ése es otro tema que no es el motivo de este post. Aquí os traemos algunos ejemplos del proceso de concienciación polìtica que llevan a cabo los guardianes de la Revolución con sus ciudadanos. No entramos a valorarlo, simplemente queremos mostrar como los cubanos viven como si estuvieran continuamente en proceso electoral con los políticos vendiendo sus proclamas en los carteles que se encuentran a cada paso. Eso sí, como dice el cartel de abajo, aquí hay un solo partido y un pensamiento único. Qué divertido, ¿no?

Lo que tienen claro muchos, los que se atreven a hablar, es que esto va para largo.

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